En el amplio mundo de la tecnología, las filtraciones son moneda corriente, pero no solo una imagen de un móvil previo a su lanzamiento o un par de capítulos de “Game of thrones” significan una filtración. Estas cuestiones forman parte de algo más grande y antiguo llamado espionaje industrial, o sea, el intento de tener una ventaja comercial de una empresa sobre la otra mediante el uso del espionaje dentro de las empresas mediante ciberataques, ciberespionaje o reclutamiento de trabajadores que generen una filtración a cambio de una extorsión o por el vil metal (comúnmente llamado “dinero”). Con todo esto, no debemos olvidar que una filtración es una forma de publicidad gratuita, así las marcas también se aseguran ventas (Iphone y Samsung saben mucho de esto).
Ahora, volviendo a los videojuegos y a la pregunta principal: las filtraciones ¿Que significan realmente? ¿Gente que vende información por necesidad económica? ¿Errores de destinatario? ¿Ciberataques o simple marketing? Bueno, un poquito de esto y otro poquito de aquello. Si bien nunca se logran saber a ciencia cierta (algo que la publicidad y el marketing ADORAN), uno analiza la situación y se pregunta ¿Quién realmente sale favorecido?
La pregunta que cierra este debate es: ¿Existe el mal marketing y la mala publicidad? Quedaron mal paradas las empresas Naughty dog Ubisoft a partir de la filtración? Creo que la respuesta está en cada uno: más allá de los números y el lugar que le otorga la prensa a una filtración ¿Que te paso a ti, como consumidor con la filtración?
Y esa respuesta, amigos míos, está dentro de cada uno de vosotros.